NOSOTROS

28 | 09 | 2020
NOSOTROS

El 2017, conocimos al grupo de Rutas de la Patria Nueva, proyecto FIC de la Universidad de Santiago y el Gobierno Regional de O´Higgins; que a través de un Diplomado, proponía empoderar y reunir a los cultores, artesanos y campesinos, con su historia y patrimonio agroalimentario. Los productos eran de primerísima calidad y tradición, pero estaban perdiendo su continuidad en el tiempo, por no haber generaciones de recambio (jóvenes interesados en aprender ni rescatar los oficios). Los productos estaban muy lejos de ser usados y comercializados, y se estaban quedando con la venta en ferias, exhibiciones esporádicas y mercados campesinos.

El Abasto nació con la misión de dar cabida, vitrina y uso permanente, a los productos patrimoniales agroalimentarios que estaban siendo rescatados, impactando realmente en la economía de los productores; y de paso, consolidar una propuesta con identidad local campesina, que tanta falta le hacía a la región. Como fundadores, una Diseñadora Industrial y un Productor Audiovisual, apostamos porque la gastronomía sería una herramienta viable de desarrollo local, para toda la cadena productiva primaria. Fue así como en Enero 2019 levantamos El Abasto, en una casona de adobe en el centro histórico de la ciudad de Rancagua, un restaurante/plataforma como embajador del territorio, poniendo en valor todo el patrimonio local, a través de una propuesta gastronómica de proximidad y de diseño local. Como ya conocíamos a muchos de los productores y cultores; nos fue muy fácil identificar los productos típicos que perfilarían el restaurante. La cocina se definió como glocal, ingredientes locales y técnicas globales; estaríamos a merced de la temporada y la disponibilidad de productos; sin carta fija, con el cambio cómo lo único permanente. La minuta se armaría en base a la Ruta de los Abastos; recorrido semanal de abastecimientos por la región, donde iríamos recolectando los insumos econtrados en el camino; ya sea por datos, referencias y la misma Ruta de la Patria Nueva. Fue así como el Cordero del Secano, la Quinua de Paredones y el Chacolí de Doñihue, fueron tomando protagonismo en los platos del restaurante, y los Rancaguinos comenzaron a interesarse en el proyecto. Pero el producto por si sólo no cuenta la historia; es el paisaje cultural, construido con el sujeto campesino y el paisaje rural, el que construye el relato; historia que conecta e involucra. Nos fuimos adentrando en conocer, un poco más en profundidad, a los productores; sus historias, anhelos, problemáticas, brechas y sueños, y esto lo fuimos transmitiendo a los comensales del restaurante. Fue naciendo una sinergia; que poco a poco comenzó a ayudar en la reconstrucción del tejido social campo-ciudad.  Todo el concepto de un restaurante, embajador del territorio; con fundamento y arraigo territorial, generó mucho que hablar entre las entidades Públicas de Fomento, Agricultura, Turismo y otros; aparte tuvimos varias notas periodísticas y de televisión, que le dieron vitrina a lo que estaba naciendo: comenzó entonces a crecer una comunidad de consumidores locales y consientes, alrededor de la comida, en El Abasto. Sin querer comenzamos a ser la cara visible, la locomotora que permitía a los campesinos entrar a la cadena formal y crear alianzas comerciales para generar ventas continuas y sostenibles en el tiempo. Al tiempo habilitamos un pequeño emporio, con venta directa de los productos típicos, para que el público pudiera comprar y preparar en sus casas. Todo este desarrollo fue muy de la mano con un trabajo en redes sociales, donde íbamos contando las aventuras de las Rutas de los Abastos, los productores que conocíamos, los productos que traeríamos y el cómo prepararlos.

Con el comienzo del Estallido Social y luego la Pandemia, tuvimos que cerrar las puertas del local. Entendiendo nuestro rol social como restaurante y comercializadores de los productos campesinos, y que no habrían fiestas costumbristas por la Pandemia, es que decidimos reinventarnos con cajitas de O´higgins, llevando lo mejor del territorio a todo Chile; migrando a un formato de venta de productos elaborados, via online. Fue así como cada bioterritorio cultural generó una Box de Maridaje; donde hemos ido acordando, junto a cada productor, y la asociación a la que pertenecía, un precio justo, una manera de conectarnos, de relacionarnos y de trabajar en conjunto. Generamos la activación de productos campesinos, e hicimos aparecer a O´higgins en la escena gastronómica nacional.

Se ha planteado un tremendo desafío, que es responder a la demanda que estamos generando, apoyar con la logística, estar conectados con los stock, abrir nuevos negocios. Toda la cadena es responsables de estos pequeños logros, porque una caja es contendora de variados productos y es embajadora del territorio en otros lugares. Constantemente nos reunimos con los productores, asociaciones y los proyectos, para contarles de la recepción del público, los problemas que han acontecido, ya sea en el transporte u otros, la retroalimentación permanente ha sido clave para poder seguir avanzando; y revisar los procesos para mejorar.

Actualmente nos dedicamos a la comercialización interna y externa (interregional) de productos campesinos elaborados; además de generar una plataforma de difusión y visibilización de los oficios pertinentes al quehacer rural. En estos meses de pandemia nos hemos consolidado con un mercado campesino online, que promueve, comercializa y despacha, productos patrimoniales de la región de O´Higgins, a todo Chile. Esperamos poder volver a a abrir nuestras puertas cuando entremos en Fase 3, y así consolidar estos 3 canales de venta: restaurante, emporio e e-commerce. El modelo de negocios de El Abasto como restaurante o como e-commerce campesino, no genera utilidades, es más que todo una inversión para la puesta en valor y para que las cosas sucedan. Es por esto que hemos concebido el restaurante como plataforma de difusión de proyectos asociados. Nuestros ingresos provienen de Asesorías, Gestiones Comerciales, Clases de Cocina, Diseño de experiencias turísticas rurales, Banqueterías, Recetarios, Catas y otras actividades que son subproductos del restaurante.

Últimos Artículos
Side Widget Blog

By registering at our shop, you will make more expedite the checkout process, you can add multiple shipping addresses, view and track your orders, and more. You can edit this text from: Themes > Theme Options > Blog